Manuel Núñez Arenas

Descendiente de una brillante familia de políticos, e intelectuales, Manuel Núñez de Arenas (1886-1951) se aproximó desde muy joven a los postulados del PSOE, del que fue activo militante en su juventud. Impulsor de espacios alternativos como la Escuela Nueva, acabó distanciándose de la dirección del partido hasta abrazar la línea “tercerista” que finalmente se escindió del partido para integrarse en el PCE. Su interés por la historia del socialismo le llevó a poner su atención en la figura de Ramón de la Sagra, a la que dedicó su tesis doctoral, publicada en 1924.

Exiliado en 1923, y de nuevo tras la guerra civil, abandonó la actividad política y reorientó su investigación hacia el estudio del siglo XIX, “tan desdeñado por desconocido”, y en particular de los primeros refugiados políticos, afrancesados y liberales. Se asentó en la Universidad de Burdeos y desde allí mantuvo una fluida relación con los primeros hispanistas franceses (Foulché-Delbosc, Georges Cirot y, más tarde, Charles V. Aubrun o Robert Marrast, entre otros), publicando numerosos trabajos que fueron recogidos a su muerte por Marrast en un admirable volumen: L’Espagne, des Lumières au Romantisme (1963).